Después de crear algunos de los personajes más icónicos de los dramatizados en Colombia, Mauricio Navas Talero se ha concentrado en el descubrimiento del ser. El suyo y el de otros. Esta es la esencia de las conversaciones que sostiene con figuras reconocidas en el espacio Ser o no ser… He ahí el podcast, cuyo estreno será el 6 de septiembre en las plataformas online.

Por Diana Herrera Rusinque / fotos archivo particular www.revistamomentos.com

Dar vida a un personaje, basado en la realidad o de ficción, es quizás uno de los retos más grandes que enfrenta un escritor. No tanto por la descripción física, que es importante por supuesto, sino por su arquitectura mental y emocional. Dotar a ese alguien de ideas, procesos mentales, traumas, alegrías, tristezas y reacciones a su entorno, implica para el escritor un profundo conocimiento del ser.

Imaginen entonces, por un minuto, queridos lectores de MOMENTOS, el proceso de creación de una mujer como Caridad Solaz de la serie Azúcar, fría y calculadora en apariencia, pero tan cargada de pasión e inseguridades en su interior. O de un Carlos Alberto Buendía, en La mujer del presidente, un hombre anodino en apariencia y, a la vez, dueño de una fortaleza que él mismo desconocía.

Detrás de estos personajes hay un mismo cerebro: Mauricio Navas Talero, el libretista apasionado por el descubrimiento del ser, no solo de sus personajes sino de quienes lo rodean, y que ha develado con el trasegar de los años su auténtica misión en la vida: “La construcción de pensamiento desde la comunicación afectiva”.

Esta misión lo ha llevado tanto al conocimiento de sí mismo como de los demás, y ahora direcciona sus pasos hacia un podcast de su autoría que se estrena en diferentes plataformas online. Su nombre: Ser o no ser… He ahí el podcast.

“Esto soy”

Nombre trascendental. ¿De quién fue la idea de aventurarse con esta propuesta en el universo de los podcast?

De mi hijo Fernando. Después de mi retiro del cargo ejecutivo que tenía en Fox, decidí que quería dedicarme a algo más que escribir. Por aquel entonces hice un podcast sobre temas de familia con Conchita Ruiz y eso me alentó para hacer el podcast corporativo de Smart Films, El Pódcast, y me quedó gustando el tema del audio. Fue cuando mi hijo, al que le agrada la manera en que yo veo el mundo, me preguntó: “¿Y para cuándo un podcast sobre lo que tú piensas de la vida?” Esa fue la semilla que dio paso a Ser o no ser… He ahí el podcast.

Usted ha dicho que el podcast no es una entrevista sino una conversación para descubrir el ser. ¿Cómo podemos entender este planteamiento?

A lo largo de mis 61 años de vida me he esforzado por gustarle a la gente, olvidándome de lo que soy. Cuando mi hijo me planteó aquella pregunta, eso se convirtió para mí en un interrogante universal: “¿Tú dónde estás?” “¿Qué huella quieres dejar?”. Por este motivo el podcast se convirtió en una urgencia de sostener conversaciones con gente que “es algo”. ¿Qué cosa? Eso es lo que buscamos descubrir durante la charla.

¿Y hasta el momento a quiénes ha descubierto que “son algo”?

Ja, ja, ja… A seres muy interesantes: Alejandro Riaño, Robinson Díaz y su esposa Adriana Arango, Jorge Enrique Abello, los integrantes de Fuck News… Tengo incluso conversaciones que sostuve con Pepe Sánchez y Frank Ramírez antes de sus muertes. Todos ellos son personas que transmiten: “Esto soy”.

¿De qué manera se desarrolla la dinámica de estas conversaciones?

Los oyentes jamás van a escuchar las preguntas tipo “¿cómo te defines?” o “¿cómo te iniciaste en tu profesión?”. Son conversaciones que se inician con una zambullida en el invitado. Por ejemplo, a los humoristas de Fuck News lo primero que les dije fue: “No me cuenten qué han hecho. Cuéntenme qué están siendo en este momento”. Esto lleva a que el invitado se conecte con su ser esencial y, de paso, que yo me conecte con el mío.

Esa conexión no es sencilla. ¿Los invitados no quedan un poco fuera de base con este tipo de preguntas?

En ocasiones sí. Recuerdo que los muchachos de Fuck News me decían que nunca les habían hecho una entrevista donde los hicieran pensar tanto (risas). Pero es que cuando logro que el invitado sea, a mí no me queda más remedio que ser yo. Porque aquí mi compromiso es ser tan honesto como pueda.

La autoconfrontación

¿Y hasta el momento qué ha descubierto de su ser a partir de estas conversaciones?

El podcast con Adriana Arango y Robinson Díaz fue muy revelador para mí. Ella es avasalladora, de una esencia similar a la de mi esposa Yesenia. Las dos son unas paisas que nacieron siendo dueñas de su autenticidad y valor para ser. En esa medida Adriana me hizo repasar mi cultura familiar y afectiva. Esa cultura paisa tan atractiva, pero tan cuestionable en ocasiones, tan responsable de lo que vive Colombia.

También descubrí que yo soy más como Robinson: los dos nos hemos pasado la vida tratando de dar gusto a otros. Al verme en él me siento reconfortado, pero el espejo de Adriana me indica que aún tengo mucho por trabajar en mí.

Pero esas revelaciones también pueden conducir a historias del pasado que quizás las personas no quieran ver…

Puede ser, pero también es importante mirar de frente esas cosas que hacen parte de lo que somos. Por ejemplo, en la conversación con Amaranta Hank, la periodista que decidió dejar su profesión para dedicarse a hacer videos porno, llegó un punto en el que, para continuar con la charla, tuve que exponerme y reconocer que durante mi adolescencia sostuve relaciones homosexuales.

Y eso no cambia el hecho de que me encanta la mujer: su piel, su figura, su olor… Todo en ellas moviliza por completo mi sistema endocrino. Pero poder hablar de aquellas experiencias de mi juventud me alivia, y espero que alivie a mucha gente que nos escucha. Es una experiencia en la que yo gané.

En estas conversaciones hay un tercer participante: el oyente.

Así es. La premisa del ser o no ser se cumple en los invitados, en mí y en la persona que escucha. Nuestro fin último es que ese oyente, a partir de estas conversaciones, también empiece a mirarse, a conocerse a sí mismo. Yo soy un convencido, sin involucrar a ninguna religión en esto, de que una de las frases más sabias que existen es la que dijo Cristo en la cruz: “Perdónalos porque no saben lo que hacen”. Es verdad. Los seres humanos, por lo general, no sabemos ni quiénes somos ni lo que hacemos.

¿Quiénes serán los próximos invitados a Ser o no ser… He ahí el podcast?

Tendremos invitados maravillosos, entre los que están Pedro Alonso, el actor de La casa de papel; y los periodistas María Jimena Duzán, Cecilia Orozco y Gonzalo Guillén. En este momento estamos en toda la etapa de postproducción de las primeras conversaciones con mi socio en este proyecto, que no es otro que mi amigo Germán Daniel León, con quien tenemos una banda de rock desde hace 20 años. Él es ingeniero de sonido y un purista en la materia, pero además participa en las charlas. Es quien alivia todo lo trascendental (risas).

Cómo conversar con tus hijos y no morir en el intento

Mauricio Navas publicará el próximo año un libro sobre este tema, y ha programado una charla dirigida a padres de familia y a personas interesadas en mejorar sus relaciones con los demás.

¿En qué consiste el taller?

A lo largo de 30 años he educado a mis hijos y me di cuenta de que el lenguaje y la comunicación son los determinantes de cómo se construye la relación y la vida con los hijos, sin violentarlos, sin pasar por encima de ellos, respetándose y permitiéndoles que ellos sean lo que quieran ser y no lo que uno quisiera que ellos fueran. El resultado a estas alturas es muy grato, mis dos hijos son dos personas muy tranquilas, muy felices, muy funcionales, y lo interesante es que los dos tienen una noción muy elevada de sí mismos, son personas que se respetan, que respetan a los demás, y todo esto nace dentro de un marco de una gran libertad con altísimos niveles de comunicación.

La comunicación que fuimos construyendo con ellos tiene ciertos parámetros que fui observando y tomando nota, y decidí escribir un libro que saldrá el año entrante donde relato cómo eduqué a mis hijos y cómo construí estos canales de comunicación.

Además, este taller está diseñado con un equipo interdisciplinario de Valencia Producciones, profesionales que me ayudaron a montar un programa completo para que la experiencia que puedan tener las personas que vengan, que no tienen que ser únicamente padres, también pueden asistir personas que no tengan hijos, pero que quieran entender cómo construir la comunicación afectiva con quienes les importan.

Estoy convencido, y las estadísticas lo dicen, que lo que deteriora las relaciones humanas es la comunicación, sobre todo si tienes en cuenta que estamos en un momento en el que la estadística tenebrosa es que en Colombia, al mes, se suicidan 30 jóvenes. Estoy convencido de que no hay buena comunicación con ellos en sus sitios de afecto y en sus sitios de trabajo. Esa es la otra tarea que tengo, ya lo presentamos en la Federación Nacional de Cafeteros y los resultados fueron muy gratos, las personas que reciben el taller quedan sensibilizadas con una sola idea: debes pensar antes de hablarles a las personas que amas.

¿Cuál es la metodología de la charla?

Es experiencial, de acuerdo con lo que viví en cada situación, por ejemplo, cuando llegamos a lo de las drogas, a lo del sexo, cuando llegamos a lo de la libertad, cuando llegaron a enamorarse, voy contando cómo observaba el fenómeno e iba construyendo formas de comunicación con mis hijos, para que eso que ellos estaban viviendo resultara positivo y no negativo ni en ellos ni en el hogar. Esas conversaciones fueron especiales porque estaban basadas en la libertad.

El individuo puede hacer lo que quiera, pero es imprescindible que se haga responsable y que tenga cuidado de no causarle daño a nadie. Parece sencillo, pero comunicarle eso a un niño no es fácil porque estamos hablando de la comunicación con los adolescentes, y eso no comienza en la adolescencia, comienza en el momento en que el niño nace, ahí tienes que empezar a construir el diseño de comunicación porque en la adolescencia, si los canales están dañados, ya están dañados. Es común que los padres atrofien esos canales muy rápido, por ejemplo, cuando el bebé dice: “¡No!” y el papá no le respeta el “¡no!”, la lesión que se causa en ese niño es muy grande, queda muy sepultada en el inconsciente del hijo y luego se presentan conductas no funcionales con el adulto.

Ese tipo de cosas las fui descubriendo, me fui dando cuenta y hacía experimentos, si decía o dejaba de decir, sobre todo dejar de decir, porque el secreto no es decir, el gran secreto de la comunicación con los hijos es poder guardar silencio y escucharlos, cosa que los padres no suelen hacer. Entonces, está basado en contar mis experiencias, en testimonios de mis hijos, en testimonios de las mamás de mis hijos, también de personas que han estado cerca de nosotros, que vieron todo el fenómeno y pueden decir, “mire, la clave es la comunicación, no es pegarle ni comprarle cosas, ni en qué colegios los pones, ni en cuántos viajes les dio al año, la clave está en cómo te comunicas con ellos”. Ese es el punto.

¿Dónde los van a realizar?

Van a ser presenciales inicialmente. Estaremos en donde nos inviten porque es un producto que estamos ofreciendo para colegios, para universidades, instituciones, agrupaciones, empresas, y vamos a anunciar los talleres en las redes sociales de Valencia Producciones, la empresa que cubre todo lo que produzco. www.valenciaproducciones.com/

También puede leer:

Las mejores rutas para disfrutar el mejor roadtrip por Sudamérica

Please follow and like us:
Wordpress Social Share Plugin powered by Ultimatelysocial