El PMI manufacturero que elaboró Davivienda para marzo de 2021 registró 52,4 puntos, resultado que crece desde los 50,2 puntos informados en febrero de este año.
De acuerdo con el informe, el resultado se dio por cuenta de que, en marzo, las empresas experimentaron un repunte de los nuevos trabajos entrantes.
Esto último se da luego de que, en febrero, retrocediera ese indicador por primera vez en cinco meses. “Según los participantes en la encuesta, el aumento de las ventas se debió a la mejoría de las condiciones de la demanda, los nuevos proyectos previstos y las actividades de reabastecimiento de los clientes”, se lee en el PMI.
El crecimiento de la producción y los nuevos pedidos se recuperó, el sector industrial creó empleo y aumentó las compras de insumos y las restricciones en la cadena de suministro impulsaron al alza la inflación del costo de los insumos, se presentan como un balance del PMI del sector industrial que adelanta el Banco Davivienda.
El sector industrial colombiano recuperó parte del terreno perdido en febrero. Por lo tanto, los datos del PMITM de marzo destacaron una nueva expansión de los nuevos pedidos y de la producción. Ante este panorama y con el objetivo de dar respuesta al avance de la demanda y mitigar el riesgo de agotamiento de inventarios, las empresas incrementaron sus compras de insumos. Sin embargo, las alteraciones en la cadena de suministro generaron retrasos en los plazos de entrega y la subida más pronunciada en los costos de insumos en diez meses. Por otro lado, las iniciativas de las empresas para despachar los pedidos atrasados y responder a los requisitos de la demanda propiciaron la creación de empleo.
El Índice de Gestión de Compras del sector industrial colombiano de Davivienda, ajustado por factores estacionales, aumentó de 50,2 puntos en febrero a 52,4 en marzo, por lo que señaló una importante mejoría en las condiciones del sector. Debido al revés que el sector experimentó en febrero, la lectura promedio del PMI del primer trimestre de 2021 (52,0) fue ampliamente similar a la registrada en el cuarto trimestre de 2020 (51,9).
En marzo, las empresas experimentaron un repunte de los nuevos trabajos entrantes, después de que en febrero retrocediesen por primera vez en cinco meses. Según los participantes en la encuesta, el aumento de las ventas se debió a la mejoría de las condiciones de la demanda, los nuevos proyectos previstos y las actividades de reabastecimiento de los clientes. A su vez, el repunte de los nuevos pedidos propició otro aumento de los volúmenes de compras, si bien el ritmo de expansión de la producción fue moderado en términos generales.
En relación con la productividad, los datos de marzo indicaron que la capacidad de los fabricantes estuvo bajo presión, ya que los negocios pendientes aumentaron por primera vez desde mediados de 2020. Además, el ritmo de acumulación de los pedidos por atender fue sólido, algo que los encuestados vincularon con el crecimiento de las ventas.
De forma simultánea, los industriales colombianos contrataron personal adicional en marzo. En efecto, el empleo creció por segundo mes consecutivo y la tasa de creación de puestos de trabajo se aceleró hasta un máximo en cuatro meses.
Por su parte, en un intento por evitar la escasez de insumos, las empresas adquirieron más materiales en marzo. Aunque el incremento de las compras de insumos fue moderado en términos generales, contrastó con la contracción registrada en febrero. Si bien los inventarios de materias primas crecieron en marzo, el ritmo de acumulación fue tan solo marginal.
Los datos subyacentes indicaron que los retrasos en los plazos de entrega de los proveedores restringieron el crecimiento. En este sentido, las dificultades en los envíos internacionales y la escasez de materias primas se destacaron como las principales causas de la ampliación de los plazos de entrega. En un contexto en el que la demanda de insumos superó la oferta, los industriales experimentaron un nuevo incremento de los costos de los insumos al final del primer trimestre. Así, la tasa de inflación ascendió hasta un máximo en diez meses y se situó entre las más sólidas en la historia de la encuesta.
Como consecuencia de ello, las empresas volvieron a incrementar sus comisiones en marzo. De esta forma, la tasa de inflación de los precios se aceleró sustancialmente en comparación con la lectura de febrero y fue la más rápida en más de cuatro años.
En este período de encuesta, los industriales se mostraron confiados en que el programa de vacunación contra la enfermedad por coronavirus 2019 (COVID-19), la diversificación de productos, las licitaciones públicas, las actividades de mercadeo y la innovación respaldarán el crecimiento de la producción a lo largo del próximo año. Por consiguiente, el nivel general de confianza empresarial permaneció en niveles sólidos, aunque se moderó en comparación con la lectura de febrero debido a la preocupación por una posible tercera ola de casos de COVID-19.
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