Lucero Ortiz y Lida Ferrer: Cuando los talentos no se improvisan

Por Guillermo Romero Salamanca Es mañana y en Bogotá el sol de enero castigaba con rayos ultravioletas. Para huir de ellos, es mejor buscar sombra en un centro comercial. De repente, a mi lado, caminan dos señoras –una rubia y una morena—mientras cantan el inolvidable “Que nadie sepa mi sufrir”, conocido también como “Amor de … Sigue leyendo Lucero Ortiz y Lida Ferrer: Cuando los talentos no se improvisan