Por María Angélica Aparicio P. Era extraño sentarme en una habitación pequeña con escasa luz natural. Olía a limpio y a un misterio profundo. Era un recinto desconocido, amoblado con asientos y una mesa de patas gruesas. Apareció una mujer alta, vestida de color marrón, de cabellos pintados y cadera ancha. Saludó con gracia y … Sigue leyendo La chica del vestido rojo
Copia y pega esta URL en tu sitio WordPress para incrustarlo
Copia y pega este código en tu sitio para incrustarlo