Por Hernán Alejandro Olano García

Un 24 de julio, en 1783, nació en Caracas el “genio de América”, “el hombre de las dificultades”, el “zambo” y “culo de hierro”, nuestro Libertador y padre de la Patria, Simón Bolívar.

Su grandeza, celebrada con plazas, calles, avenidas, bustos, estatuas pedestres y ecuestres (así como 42 ciudades o pueblos con su nombre, tan solo en Norteamérica), va más allá de una referencia de su apellido dentro de la moda parisina, pues en su estadía en la capital francesa en 1804, el joven de 21 años recorría las calles con un sombrero, qué, representaba para este joven viudo, días de lujo y placeres junto a su prima segunda Fanny Louise Troubi y Aristagueta (Fanny de Villars), esposa de un botánico, Eugene Barthelemy Regis Dervieu du Villars, más interesado en las plantas que en su mujer, la cual después de la visita de su primo tuvo una bebé, que se presume fue una de las hijas de Bolívar.

A partir de 1819, ya habiendo liberado a Colombia, el recuerdo de Bolívar hizo que se pusiera en boga entre los caballeros, un sombrero de fieltro gris y con bordes levantados, de alas anchas y alta copa en forma de vaso, que adquirió el nombre de “chapeau Bolívar”, de brillante prestigio, pero pasajero uso.

Ese sombrero resultó siendo muy popular en Europa, a punto que las personas de ideas progresistas lo lucían, mientras las tradicionalistas o monárquicas se distinguían con otro sombrero llamado el “Morillo”, en alusión al “pacificador” don Pablo Morillo, marqués de la Puerta y conde de Cartagena de Indias.

La batalla de Ayacucho fue el ultimo enfrentamiento militar de Simón Bolívar contra las tropas españolas en América. 

Incluso, en la escultura que representa al pintor Francisco de Goya y Lucientes frente al Museo del Prado, en Madrid, éste luce un “Bolívar” en su mano derecha. Así, ha llegado hasta nuestros días la forma y estilo del “chapeau” de nuestro Libertador, que fuera tendencia extendida en Europa.

Bolívar, exitoso con las damas, también comenzó a hacer parte de la moda femenina francesa a partir de 1824, cuando el grabador de viñetas e ilustrador de libros Jean Denis Nargeot, decidió confeccionar abanicos para dama con la cara de Simón Bolívar.

Existen también los Habanos Bolívar, marca fundada en 1902 de la Fábrica de Partagás, en el centro de la Ciudad de La Habana.

En coincidencia con el carácter de la figura histórica que le da nombre, este Habano se caracteriza por la fuerte personalidad de su sabor. Bolívar es una de las marcas con mayor fortaleza y sabor de Habanos. La ligada compuesta de hojas de tripa y capote es especialmente apreciada por los fumadores más expertos. En 2018 lanzaron el “Bolívar soberano” y en 2021 el “Bolívar Regentes”.

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