Jeanne Calment, falleció a los 122 años en Francia.

Según un estudio publicado en la revista Nature Communications, los seres humanos podrán llegar a vivir entre 120 y 150 años. No ahora, pero sí en unos años cuando la tecnología y la ciencia así lo permitan.

Esa es la principal conclusión a la que ha llegado Gero, una empresa de Singapur que ha analizado el ritmo de envejecimiento de los ciudadanos de Rusia, Reino Unido y Estados Unidos.

Para ello, la compañía ha evaluado las desviaciones de la salud estable y los cambios en los recuentos de células sanguíneas en distintos grupos de edad. El patrón en todos ellos fue exactamente el mismo.

Así descubrieron que, a medida que aumentaba la edad de los locales, aparecían factores que provocaban una disminución de la capacidad para devolver las células sanguíneas a un nivel estable después de su interrupción. Ese sería el caso, por ejemplo, de una enfermedad. De modo que, al trasladar este ritmo de declive para determinar cuándo la resiliencia desaparecería por completo, encontraron un rango de 120 a 150 años.

Tal y como recoge Computer Hoy, lo que está claro es que, para alcanzar estas estimaciones, es necesario que el estado de salud del sujeto se encuentre totalmente exento de cualquier patología. Esto que actualmente parece imposible, no lo sería tanto en el futuro. De hecho, según Scientific American, hoy ya encontramos un precedente: la persona de mayor edad registrada ha sido Jeanne Calment, que falleció a los 122 años en Francia.

Textos y fotos: elmundoalinstante.com

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