Por Guillermo Romero Salamanca
No piensen que es mentira. Es totalmente cierto.
En estos días de febrero, cualquier persona puede pasar por las calles de Bogota y no verá basuras en las calles. Sería imposible que ello ocurriera. Además, quien no acate las órdenes de aseo y de recolección bien podría llevarse una multa.
No obstante, si por algún motivo, de lluvia o de daño de un cargador de basura, se le comunicará telefónicamente a los ciudadanos del sector la hora exacta en la cual pasará el camión. Se evita que los residentes pierdan tiempo o que se aglomeren canecas con desperdicios.
El servicio de transporte público es uno de los más ordenados del país y una de sus principales características es su puntualidad, no hay quejas por sobrecupos, ni mucho menos de extensas filas de personas para ingresar a los buses. Hace muchos años no hay carteristas en el transporte. O nunca se ha sabido de un hecho delictivo de estas características.
Los habitantes hacen parte de diferentes comités para arreglar parques, jardines, escuelas y siembran árboles para contrarrestar la escasa contaminación que pueda sentirse por el paso vehicular.
La policía no ha impartido partes por altos volúmenes de música costeña, ni por riñas por bebedores en las esquinas de los domingos. Es más, los ciudadanos tienen extraordinarias relaciones con los agentes y, por estos días, tal vez por el frío, los invitan a comer donas con café caliente.
En octubre todos los estamentos gubernamentales colaboraron con la solicitud de la comunidad que pedía arreglos en las bibliotecas y pintaron, entre todos, los salones, brindando así mayor comodidad a los estudiantes.
Una de sus peticiones ahora está en la construcción de una gran piscina para que en las vacaciones de junio, los jóvenes puedan competir y tener unos merecidos días de descanso aprovechando las temperaturas de los mediodías.
Quienes colaboren con el embellecimiento de la ciudad podrán llenar un sencillo formulario, a través del internet y obtendrán jugosos descuentos en los impuestos prediales.
Jorge Medina, encargado de la Secretaría de Mejoras públicas comentó que ahora se les informará a los propietarios que tengan edificaciones y no los hayan pintado, ni arreglado sus fachadas, tendrán tiempos de permisos especiales para que lo hagan, pero ha visto también que los jóvenes estudiantes de artes, no pintan de grafitis las paredes, ni postes, ni mucho menos las puertas comerciales. Los ha felicitado por este apoyo.
Por esto, la ciudad se ve ahora resplandeciente.
Mediante una votación electrónica, los ciudadanos de Bogota, seleccionaron a Jeanne M. Cook –una rubia con pinta de Boston—como la empleada ejemplar de la Administración pública. La gente ha dicho que ella respeta a los ciudadanos, los atiende con especial atención y sobre todo, les da una pronta respuesta. En la ceremonia de elogios, los aplausos duraron más de 30 minutos.
Los hechos de violencia están reducidos a lo mínimo y gracias a su lema: El Departamento de Policía de Bogota está aquí para proteger y servir a la comunidad de Bogota, los agentes se dedican a cuidar a los niños, a organizar partidos benéficos y a colaborar con personas adultas para que crucen las calles.
La máxima preocupación de los 8.249 habitantes de Bogota, en el Condado de Bergen, en el estado estadounidense de New Jersey, a 18 kilómetros de Nueva York, es organizar el transporte para las salidas de los adultos mayores en el próximo verano.
