Evidencias científicas de la Organización Mundial de la Salud (OMS) demuestran que los cigarrillos eléctricos contienen sustancias cancerígenas como formaldehído, tolueno, plomo, cadmio y acetaldehído.
Durante los últimos 15 años no ha parado de crecer el consumo de cigarrillo electrónico en el país, la más reciente Encuesta Nacional de Tabaquismo estableció que el 15% de los jóvenes entre los 12 años y los 18 años, han probado este producto alguna vez en su vida y la Asociación de Vapeadores en Colombia (Asovape), estimó que cerca de 4.000 personas que utilizan este método.
Hoy en día se evidencia una explosión en la publicidad, promoción y patrocinio de dispositivos electrónicos para fumar tabaco, que atendiendo a las ultimas tendencias en diseño y mercadotecnia, buscan posicionarse como parte de nuestras costumbres sociales.
Diferentes entidades en Colombia como la Liga Colombiana contra el Cáncer y la Universidad de la Salle, se muestran preocupados por los estragos que están causando los dispositivos y reunieron en un ejercicio pegagógico a médicos, docentes y expertos para escuchar de viva voz de los universitarios qué saben, qué suponen, qué creen, qué han escuchado y qué han sentido respecto al cigarillo electrónico.
“Escuchamos docenas de frases peligrosas que nos inivitan a romper los mitos que tiene este tema. Muchos tienen la falsa creencia de que esos dispositivos son inofensivos porque generan vapor y no humo, huelen rico, no les deja mal olor en la ropa, pelo y boca, se pueden llevar en cualquier bolsillo, tienen diseños atractivos y supuestamente sirven para dejar de fumar”, asegura Laura María Rincón Aljuri, directora de Bienestar de la Vicerrectoría de Promoción y Desarrollo Humano de la Universidad de La Salle.
Para los expertos lo que empezó como una moda se está conviertiendo en un peligro silencioso que tiene efectos en dos dimensiones. La primera a nivel de salud pública porque el consumo enferma tanto al fumador activo como el pasivo. La segunda a nivel ambiental porque aunque los productos usados tengan fragancias dulces como manzana, canela o limón, lo cierto es que también contaminan.
Según el Ministerio de Salud y Protección Social, al día 88 personas pierden la vida por causas derivadas del tabaquismo, así mismo investigaciones señalan que sustancias de los cigarrillos electrónicos contienen partículas tóxicas o cancerígenas en niveles tan altos como el cigarrillo tradicional.
Respecto a la falsa creencia de que es la mejor opción para dejar de fumar, un estudio realizado en Inglaterra reveló que 82% de las personas que se pasaron al cigarrillo eléctrico con este fin no lo lograron y por el contrario, si crearon dependencia al producto que además genera menor rechazo por parte amigos y familiares del consumidor dado que no detectan olores incómodos, ni molestia inicial al respirar.
15 cosas que debe saber de los cigarrillos electrónicos
El siguiente listado de riesgos que los colombianos deben conocer.
A nivel de salud:
- Los efectos acumulativos de la exposición al vapor de los cigarrillos electrónicos en la boca y sus anexos aumentan el riesgo de infección, inflamación y enfermedades periodontales que podrían llegar a cáncer.
- Los cigarrillos electrónicos contienen sustancias tóxicas que afectan al corazón y a los vasos sanguíneos, entre estos: la muy conocida nicotina, el propilenglicol, la glicerina, los disolventes, los aromatizantes y conservantes.
- Ya se conocen casos de intoxicaciones por nicotina, por ingesta de recambios de los cigarrillos electrónicos.
- La irritación en ojos y garganta, las quemaduras por contacto y la probabilidad de explosión del producto a causa de sus baterías hacen parte de los riesgos.
- Estudios indican que los estudiantes que han usado cigarrillos electrónicos antes de comenzar 9º grado son más propensos que otros estudiantes a empezar a fumar cigarrillos convencionales y otros productos de tabaco en el próximo año.
- Las pruebas científicas acerca de las consecuencias a largo plazo señalan riesgo para el adecuado desarrollo cerebral, debido a la exposición del feto y los adolescentes a la nicotina.
- La Organización Mundial de la Salud comprobó que tienen nicotina y sustancias tóxicas que causan cáncer, enfermedades respiratorias y cardiovasculares, igual que un cigarrillo tradicional.
- El consumo de los adultos expone a los niños al aerosol de los cigarrillos electrónicos, además de «establecer un modelo de comportamiento adictivo».
- Este nuevo modo de fumar también causa neumonía lipoidea. En el mundo ya hay casos aislados en grandes consumidores, relacionados con el depósito de glicerol en el pulmón.
- Según la Agencia de Drogas y Alimentos de Estados Unidos (FDA) las pruebas mostraron la presencia de dietilenglicol, un químico con historial de envenenamientos masivos y muertes, el cual viene siendo utilizado en el cigarrillo electrónico de manera desapercibida por el usuario.
A nivel ambiental:
- Deterioro de la capa de ozono: en el proceso de combustión de los líquidos implementados en los dispositivos electrónicos, se genera un aerosol tóxico para la salud humana y dañino para la atmósfera, ya que estos componentes son sustancias agotadoras de la capa de ozono.
- Nicotina residual: El residuo generado por cartuchos implementados en los dispositivos electrónicos es un material que no tiene ningún otro uso, por lo tanto, se convierte en un residuo ordinario que tiene que disponerse directamente en rellenos sanitarios.
- Impacto en los rellenos sanitarios: los residuos de estos productos generan como consecuencia que la vida útil de los rellenos disminuya, ya que estos residuos pueden corresponder hasta 40% de los generados en las ciudades.
- Disposición de las baterías de los cigarrillos electrónicos: Las baterías implementadas por estos dispositivos contienen componentes peligrosos y tóxicos, por lo que cuando son desechadas se convierten en residuos especiales que deben disponerse mediante procesos controlados teniendo.
- Deforestación industria tabacalera: Algunos de estos dispositivos contienen tabaco, para la obtención de esta materia prima las industrias tabacaleras realizan siembra de esta planta en miles de hectáreas de tierra fértil, siendo una de las principales acciones generadoras de la deforestación a nivel mundial.
Lea también: