Cualquier persona que quiere bajar de peso, perder grasa o ganar músculo busca alimentos que sean positivos en su dieta. Y al mismo tiempo, deshecha o elimina aquellos con cierta fama de ser malos y perjudicar nuestro objetivo.
Uno en concreto, siempre asociado a los alimentos «negativos», no es para menos una comida esencial para las dietas, pero su consumo moderado podría darnos ciertos beneficios: las aceitunas.
Las aceitunas son un alimento emblemático de la dieta mediterránea y una excelente fuente de nutrientes esenciales. Estas pequeñas frutas del olivo, conocidas por su sabor característico y versatilidad culinaria, han sido consumidas durante siglos por sus propiedades saludables y su capacidad para complementar una amplia variedad de platos. No obstante, al igual que puede ocurrir con cualquier alimento, también presentan ciertos aspectos a considerar en el contexto de una dieta equilibrada.
Se trata de un alimento con «fama de engordar», pero puede servir para una dieta baja en grasas y que nos ayude tanto a perder peso como a ganar músculo.
¿Las aceitunas son superalimentos? Estos son sus propiedades y beneficios para la salud
Las aceitunas contienen ácidos grasos monoinsaturados, principalmente ácido oleico, que se asocian con beneficios para la salud cardiovascular. Estas grasas pueden ayudar a reducir los niveles de colesterol «malo» y aumentar el colesterol «bueno», contribuyendo a un corazón más sano.
Asimismo, son ricas en compuestos y propiedades antioxidantes, como polifenoles, vitamina E y flavonoides, que ayudan a combatir el daño oxidativo en las células. Esto puede reducir la inflamación y proteger contra enfermedades crónicas, como el cáncer y la diabetes.
Por otro lado, las aceitunas contienen un importante aporte de vitaminas y minerales, tales como vitaminas A y E, esenciales para la salud ocular, la piel y el sistema inmunológico. También contienen minerales como hierro, calcio y magnesio, que son importantes para la formación de huesos, la producción de hemoglobina y la función muscular.
Y ayudan a facilitar la digestión, pues su consumo moderado puede beneficiar el sistema digestivo debido a su contenido en fibra. Además, los polifenoles presentes en las aceitunas también pueden actuar como prebióticos, fomentando una microbiota intestinal saludable.
No obstante, debemos tener en cuenta que las aceitunas tienen un alto contenido de sodio, que puede contribuir a problemas de hipertensión arterial y retención de líquidos, especialmente en personas sensibles a la sal. También, aunque las aceitunas son relativamente bajas en calorías, su densidad energética puede acumularse si se consumen en grandes cantidades. Esto es especialmente relevante para quienes buscan controlar su peso.
En sí, las aceitunas son un alimento sabroso, nutritivo y lleno de beneficios para la salud cuando se consumen de manera responsable. Incorporarlas en la dieta con equilibrio y conciencia puede ser una excelente manera de disfrutar de sus propiedades mientras se cuida la salud.
Textos y fotos: www.elmundoalinstante.com
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