La farmacéutica también informó que su vacuna puede ser almacenada a entre -25 °C y -15 °C durante dos semanas, lo que facilitaría la cadena de frío que requiere

La primera dosis de la vacuna contra el COVID-19 de Pfizer/BioNtech es eficaz en un 85% dos a cuatro semanas después de su administración, según un artículo publicado en la revista científica The Lancet a partir de datos del personal sanitario del mayor hospital de Israel.

El país lanzó el 19 de diciembre una gran campaña de vacunación contra el COVID-19 tras un acuerdo con Pfizer que permitió a Israel obtener rápidamente millones de dosis a cambio de suministrar datos biomédicos sobre el efecto de la vacuna.

Hasta ahora 4,23 millones de israelíes (47% de la población) han recibido al menos la primera dosis de la vacuna -de ellos 2,85 millones (32%) ya tuvieron la segunda dosis necesaria-, según el ministerio de Salud.

Recientes estudios israelíes cifraron en 95% la eficacia de la vacuna una semana después de la segunda dosis y este nuevo estudio del hospital Sheba, ubicado cerca de Tel-Aviv, la considera eficaz ya en un 85% entre dos y cuatro semanas después de la primera dosis.

“De dos a cuatro semanas después de la (primera) dosis hay ya un fuerte índice de eficacia, con una reducción del 85% de los casos sintomáticos”, resumió Gili Regev-Yochay, coautora de este estudio en un debate vía internet con periodistas.

Pese a que esta vacuna Pfizer/BioNtech demuestra su eficacia para reducir el número de casos sintomáticos de COVID-19, la “gran, gran pregunta” sigue siendo saber si reduce también la transmisión del virus, precisó Regev-Yochay.

“Trabajamos en ello (…) y esperamos tener pronto buenas noticias”, agregó.

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Albert Bourla, presidente y director ejecutivo de Pfizer

Cadena de frío

Además, Pfizer y BioNTechel envío de nuevos datos a la Administración de Drogas y Alimentos de los EE. UU. (FDA) que demuestran la estabilidad de su vacuna COVID-19 cuando se almacena a entre -25 °C y -15 °C, temperaturas que se encuentran más comúnmente en congeladores y refrigeradores farmacéuticos.

Estos datos se enviaron a la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) para actualizar el uso de emergencia que recibió. Esta información permitiría almacenar los viales de la vacuna a estas temperaturas durante un total de dos semanas como alternativa o complemento del almacenamiento.

“Hemos estado realizando continuamente estudios de estabilidad para apoyar la producción de la vacuna a escala comercial, con el objetivo de hacer que la vacuna sea lo más accesible posible para los proveedores de atención médica y las personas en los EE. UU. y en todo el mundo”, dijo Albert Bourla, presidente y director ejecutivo de Pfizer.

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