Colombia produce cada año alrededor de 24 millones de toneladas de residuos. En este contexto, 74.313 recicladores de oficio cumplen un rol clave en la economía circular al rescatar materiales que, de no ser recuperados, terminarían en rellenos sanitarios. Sin embargo, la mayoría de ellos desarrollan esta labor en condiciones precarias, sin acceso a salud, seguridad laboral ni herramientas básicas. 

En el marco del Día Mundial de los Residuos, que se conmemora el 22 de septiembre, su papel cobra especial relevancia: los recicladores son actores invisibles en la cadena de la economía circular, pero fundamentales para evitar que toneladas de desechos lleguen a rellenos sanitarios que hoy se encuentran cerca de su límite de capacidad.

La situación refleja una tendencia regional: en América Latina y el Caribe las tasas de reciclaje se mantienen en torno al 4 %, muy lejos de los avances en Europa, donde en las últimas dos décadas se pasó del 33 % al 49 %, de acuerdo a datos del Foro Económico Mundial.

“El reciclaje ya no es una acción aislada, sino un eje estratégico para las compañías que buscan competitividad y sostenibilidad. Desde Tork realizamos un seguimiento permanente de nuestras emisiones y procesos para identificar oportunidades de mejora. Nuestro propósito es avanzar hacia modelos productivos que reduzcan el impacto ambiental y fortalezcan la cultura del reciclaje en todas las etapas de la cadena de valor”, destacó Felipe Gómez, director de negocios en TORK® Colombia.

En esa línea, el Estudio de Sostenibilidad Empresarial 2024 de Deloitte revela que el 85 % de los líderes empresariales han aumentado las inversiones en sostenibilidad en el último año como parte de su estrategia para mitigar el impacto ambiental.

Aportes del sector privado a la economía circular

TORK®, antes Familia Institucional, ha liderado en Colombia y Latinoamérica diferentes iniciativas para dignificar la labor de los recicladores y fortalecer los modelos de reciclaje empresarial, entre ellas destacan:

  • Recuperación del 95 % de los residuos en la planta de Cajicá, con la meta de alcanzar el 100 % de reutilización para 2030.
  • Reutilización total del lodo papelero como compostaje, en alianza con ladrilleras, evitando así su disposición en rellenos sanitarios.
  • Recuperación de más de 6.000 dispensadores en Latinoamérica, con 1.700 unidades restauradas en 2024; los no reutilizables se transforman en materia prima para nuevos productos de higiene.

Casos de innovación: del vaso rojo a la higiene

Los avances en la reducción de residuos han sido posibles gracias a proyectos que integran innovación y sostenibilidad. Un ejemplo destacado es el piloto desarrollado por TORK® en Colombia en alianza con Juan Valdez, orientado a transformar los tradicionales vasos rojos de la marca cafetera en productos de higiene.

Solo en 2024, esta iniciativa permitió recuperar más de 797 kilos de cartón y 262 kilos de vasos con recubrimiento Polyboard, demostrando que los residuos pueden reincorporarse a la cadena productiva y convertirse en recursos de valor.

Salud visual: una apuesta por la seguridad y dignidad de los recicladores

De forma complementaria, en los últimos dos años, la compañía y la Fundación Grupo Familia han liderado cinco jornadas de salud visual en ciudades como Cajicá, Bogotá, Barranquilla, Cartagena, Santa Marta y Medellín, beneficiando a más de 180 recicladores.

La estrategia, realizada en alianza con la Clínica de Optometría de la Universidad de La Salle y la Fundación Oftalmológica del Caribe, permitió entregar gafas formuladas a quienes lo necesitaban. Esto reduce riesgos laborales, mejora la clasificación de materiales y evita el uso de gafas inadecuadas encontradas entre los residuos.

“El reciclaje es un trabajo esencial para las ciudades y para la sostenibilidad de la región. Mejorar las condiciones de quienes lo hacen posible no solo es un tema de justicia social, sino también de productividad y seguridad ambiental”, puntualiza Paulina Barragán, gerente de Comunicaciones y Sustentabilidad para Latinoamérica en TORK®.