Por Guillermo Romero Salamanca
Cuando Alberto Suárez López, gerente de promoción de Discos CBS, la compañía de la música, llegó a su oficina en Bogotá, el 17 de noviembre de 1988, recibió una trágica noticia: en la noche del 16, en su oficina de CBS en México, fue encontrado muerto, con un tiro en la cabeza, el productor Federico Méndez.
Los empleados de la disquera multinacional en Colombia daban una y otra versión especulativa sobre lo ocurrido. Alberto llamó a México y le dijeron que aún no sabían los motivos por los cuales el compositor del exitazo “De qué manera te olvido” había tomado esa fatal determinación.
Unas semanas atrás, Alberto Suárez lo había conocido. Estuvo en la primera gira que Vicente Fernández hizo a Colombia y que también representaba su primer periplo fuera de México.
Federico Méndez, según recuerda ahora Alberto Suárez, era un hombre dinámico, jovial, alegre. Aconsejaba a Vicente en sus actuaciones en televisión. Estuvo en el almuerzo con Jorge Barón Televisión y habló de sus composiciones y sus proyectos.
Alberto Suárez tuvo el privilegio de entregarle a Vicente Fernández su primer Disco de Oro por sus ventas discográficas en Colombia. En el programa “El show de las estrellas”, Alberto homenajeó al charro mexicano, quien tuvo palabras de elogio para con el promotor colombiano.
Con el apoyo de Películas Mexicanas y Discos CBS (hoy Sony Music) convencieron al empresario Guillermo Arenas, residente en Caracas, para que trajera a Vicente Fernández a Colombia.
La gira se hizo en Venezuela y en Colombia. Guillermo encargó a la administradora y relacionista Fanny Arenas, conocida en los dos países por sus conciertos con las figuras de la canción como Mirla Castellanos y Claudia de Colombia, entre otros, para coordinar la gira.
Vicente Fernández vino con su grupo musical, pero, además, contó con el apoyo de Federico Méndez, quien era uno de sus compositores de primera línea, y ejecutivo de la CBS en México.
“Federico era uno de los mejores amigos de Vicente Fernández. Era su consejero en temas musicales y de presentaciones. Además de compositor era también cantante y productor en estudios de grabación”, cuenta Alberto.
“Federico era un hombre dinámico, jovial, alegre. Aconsejaba a Vicente sobre su posición en las cámaras de televisión, algunas respuestas para los medios y palabras de agradecimiento para periodistas y público en general”, rememora ahora Alberto Suárez, el gran promotor discográfico de Colombia.
¿QUIÉN ERA FEDERICO MÉNDEZ?
Según narra la Asociación de Autores y Compositores de México, “Federico Méndez Tejeda, nació en la calle de Valentín Gómez Farias, barrio de Guadalupe en la Ciudad de Aguascalientes, el 22 de noviembre de 1933”.
Cuentan que, desde su niñez, tuvo la inclinación natural por la música. Provenía de una familia humilde, hacía una digna labor cargando canastas en el mercado de Aguascalientes, y cantando siempre que podía.
A sus 8 años se presentó su primera gran oportunidad de triunfo en un concurso del 10 de mayo en el Teatro Morelos, cuyo premio fue de 100 pesos. Ahí, el pequeño Federico vivió una escena conmovedora, ya que a pesar de no haber tenido la oportunidad para comprar ni un par de zapatos, se presentó cantando los temas: La feria de las flores y Un Vagabundo. Ante su interpretación, el público lo ovacionó y a gritos pidió que el jurado le otorgara el premio al descalzo.
El triunfo logrado en ese certamen, no sólo le permitió ganar los 100 pesos, sino que le abrió las puertas en la Radio Local.
Poco tiempo después se fue con su familia a vivir a Ciudad de México, donde inició la lucha trabajando como mozo, herrero, obrero, lavando carros, entre otros.
A los 12 años llegó hasta las puertas de la XEW para buscar a su ídolo, Pedro Infante. El carismático artista le tomó simpatía, llegando incluso a lograr hacerlo entrar a los estudios para que asistiera a sus actuaciones.
Asimismo, Federico Méndez iba a la Plaza Garibaldi con su hermano José, quien lo presionaba para que siguiera esta carrera, ya que veía en él una joven promesa. Para su buena suerte, un buen día lo invitaron a cantar en uno de los tantos programas que XEW transmitía en directo desde ese lugar de culto de la música mexicana.
Así, su gran voluntad por salir adelante le rinde más frutos, ya que es precisamente en Garibaldi, en donde este joven y talentoso compositor conoció a Javier Solís y reafirma su amistad con José Alfredo Jiménez, dos grandes personalidades de la canción ranchera.
De la misma manera, también logró relacionarse con Álvaro Carrillo quien lo motivó para formar el Trío Universitario.
En sus inicios de autor, Federico Méndez ingresó a la Facultad de Química de la UNAM, y dejó huella al fundar la primera estudiantina en el Distrito Federal, misma con la que logró un gran éxito.
Como compositor, la primera canción que escribió Federico Méndez fue: “A Punto de Gritar”, y la grabó Heriberto Molina, violinista del Mariachi de Silvestre Vargas.
UN COMPOSITOR INIGUALABLE DE ÉXITOS
El notable compositor y cantante Federico Méndez tiene en su haber más de 400 canciones, de las cuales se han grabado ya casi 300 en las voces de un sinnúmero de intérpretes muy importantes en México y el extranjero. Dentro de sus éxitos más sonados podemos mencionar: “De qué Manera Te Olvido”, “De Parte de Quien”, “Y Tú me Vas a Recordar”, “Ese Señor de las Canas”, “Pero Sin Querer”, “Aprendiste a Volar”, “Marioneta”, “Si Quisieras”, “María María”, “Dolores”, “Morena”, “Agenda”, “Las Ausencias”, “Derrotado Corazón”, “Corazón De Mentiras”, “A Fuego Lento”, “El Ranchero”, “Me Está Faltando Tu Amor”, “A Punto De Gritar”, “Mi Bolero Más Triste”, “Ojos De Almendra”, “Pero Traiciones No”, “Va Llorando Soledad”, “ Hoy Platiqué Con Mi Gallo”.
Además del ranchero, son muy variados los géneros cultivados por este compositor: tropical, norteño, balada, bolero, vals peruano e instrumentales que han sido llevados a las telenovelas como fondos musicales.
EL LARGO LISTADO DE CANTANTES
Asimismo, es muy vasta la diversidad de reconocidas figuras solistas, grupos, bandas y tríos que han puesto sus peculiares voces o estilos musicales a sus composiciones.
El listado es extenso. Vicente Fernández, Lorenzo de Monteclaro, Gerardo Reyes, Felipe Arriaga, Adolfo Garza, Juan Luis, Víctor Manuel Sosa, Cuco Sánchez, Pedro Fernández, José Martín, Fernando de la Mora, David Corpus, Heriberto Molina, Leo Dan, Marco Antonio Vázquez, Severiano Hernández, Jeronimo’s, Jaime Moreno, Gaviota, Los Baby’s, Los Freddy’s, Los Tukas, Los Dinner’s, La Tropa Loca, Los Alcántara, Sonora Santanera, Los Muecas, Hugo Avendaño, Lupita D ́alessio, Angélica María, Manoella Torres, Sonia Rivas, Vikki Carr, Olga Guillot, Irma Carlón, Rina, Los Broncos de Reynosa, Los Alegres de Terán, Los Lobos del Norte, Los Apodaca, Los Invasores de Nuevo León, Hermanos Gómez, Ramón Ayala, Los Panchos, Los Montejo, Los Cantores del Camino, Tere y Marisela, Dueto Fontana, Hermanas Huerta, Lucha Villa, María de Lourdes, Queta Jiménez La Prieta Linda, Valentina Leyva, Alicia Juárez, Beatriz Adriana, Aida Cuevas, Conchita Solís, Amalia Mendoza La Tariacuri, Rosenda Bernal, Carmen Cardenal, Chelo, Malena Reyes, Lucero Campos, Lupe Mejía La Yaqui, Zoyla Flor, Nuri Guiza, Macaria, Lisa López, Araceli Parra y Amalia Massias, entre tantas.
QUINCE DÍAS ANTES HABÍAN ASESINADO A UN GRAN AMIGO DE VICENTE
Si bien 1988 le abrió las puertas al estrellato de manera internacional, Vicente tuvo dos desagradables noticias: las muertes de sus grandes amigos Felipe Arriaga y Federico Méndez.
Estaba en gira por los Estados Unidos cuando recibió las nefastas informaciones.
La primera ocurrió el 3 de noviembre de 1988, a las 19:15 horas, a las afueras de la residencia de Felipe Arriaga y Modesta, su esposa, una casa ubicada en Playa Miramar 361, en la colonia Militar Marte, al sur de la Ciudad de México.
Felipe fue la persona que más ayudó a Vicente en los comienzos de su carrera. El actor lo llevó a los estudios, le presentó personas para que mostrara su talento y le prestó dinero en sus primeros años de matrimonio.
“El Cotija”, como también le apodaban, se encontraba acompañado de su hijo mayor y un amigo de éste, contemplando el nuevo auto del cantante, un Ford Cougar recién comprado, cuando se les acercó una van azul, sin placas, de la que bajaron dos individuos desconocidos y le dijeron: «Hasta que te encontramos, ahora sí te vas a morir» y le dispararon con una metralleta. El cantante recibió cinco balazos en diferentes partes del cuerpo.
Esta noticia fue traumática para Vicente, que se encontraba de gira y no pudo acudir a las exequias, pero el segundo golpe duro vino la noche del 16 de noviembre de 1988 cuando Federico Méndez fue encontrado sin vida, con un tiro en la cabeza, en su oficina de la disquera CBS, donde había estado trabajando hasta tarde.
Durante el sepelio de Federico, el mariachi Real de Jalisco interpretó “De qué manera te olvido”, entre otros temas del difunto y que fueron base para el estrellato de Vicente Fernández.
“No todo fue alegría en la vida de Vicente”, resume así Alberto Suárez, el promotor de más de mil grandes éxitos discográficos en Colombia.
“Federico Méndez, mi amigo incondicional, fue parte importante de mi carrera desde el inicio cuando empecé a cantar solo por propinas. Nunca olvidé su apoyo y al pasar los años lo hice mi director artístico. Siempre lo consideré mi hermano, mi familia”, dijo Vicente sobre Federico.
También puede leer:
Vicente Fernández: una máquina productora de dinero