Con información de https://www.revistacristovision.com/
Las imágenes aumentan en las redes sociales. Hombres y mujeres en Nueva York, Madrid, Roma, Varsovia, Caracas, Buenos Aires y decenas de ciudades más caminan mientras rezan el rosario.
Se le ve también con su camándula en mano en los transportes masivos como Transmilenio de Bogotá, el Metro de Medellín o el Mio de Santiago de Cali.
Otros, en silencio, mientras van por la calle, también rezan. Amas de casa, mientras adelantan algún oficio, también. Unos jóvenes sacan unos minutos para orar.
Los primeros sábados de mes, en muchas parroquias, como sucede en Santa María del Camino al norte de Bogotá, hacen el “Rosario de Aurora” y vecinos del sector tienen su encuentro a las seis de la mañana, con camándula en mano y mientras andan por las calles del barrio, adelantan los misterios Gozosos.
La diputada Simone Marquetto del parlamento de Brasil propuso que el 7 de octubre fuera declarado en Brasil día nacional del Santo Rosario.
El viernes 27 de octubre de 2023, a las 6 pm hora local, en la Basílica de San Pedro, decenas de personas se unieron al Papa Francisco para rezar por el don de la paz con el Santo Rosario y Adoración Eucarística.
Decenas de personas se reúnen frecuentemente en Buenos Aires para rezar.
El rosario no es sólo para sacerdotes o personas de vida consagrada y por eso decenas de profesionales de distintas carreras, abogados, médicos, arquitectos, ingenieros, comunicadores sociales, taxistas, que sacan 15 minutos del día para rezarlo, otros aprovechan a rezar una parte mientras hacen fila en un banco o esperan su turno para pagar el mercado.
Algunos se apoyan del internet para rezarlo, con guías en Spotyfy o en YouTube.
¿Qué es el Rosario?
El Rosario es una oración tradicional católica que busca honrar a la Virgen. En un inicio constaba de quince “misterios” que recordaban momentos (gozosos, dolorosos y gloriosos) de la vida de Jesús y de María. En el año 2002 san Juan Pablo II añadió los misterios luminosos que permiten meditar sobre la vida pública de Jesús.
También se llama “rosario” al objeto formado de cuentas que se utiliza para recitar esta oración.
¿Cómo y cuándo nació esta devoción?
El origen del Rosario se remonta al nacimiento del Avemaría en el siglo IX, como oración para honrar a María, la Madre de Dios. Parece que el Rosario tuvo su origen en la orden de san Benito y se expandió por acción de los dominicos.
Desde el sí dado por la fe en la Anunciación, y mantenido sin vacilar al pie de la Cruz, la maternidad de María se extiende desde entonces a los hermanos y a las hermanas de su Hijo.
A partir de esta cooperación singular de María a la acción del Espíritu Santo, las Iglesias han desarrollado la oración a la santa Madre de Dios, centrándola sobre la persona de Cristo manifestada en sus misterios. En los innumerables himnos y antífonas que expresan esta oración, se alternan habitualmente dos movimientos: uno engrandece al Señor por las maravillas que ha hecho en su humilde esclava, y por medio de ella, en todos los seres humanos; el segundo confía a la Madre de Jesús las súplicas y alabanzas de los hijos de Dios, ya que ella conoce ahora la humanidad que en ella ha sido desposada por el Hijo de Dios.
¿Cómo se reza el Rosario?
El Rosario se inicia con la señal de la Cruz. Posteriormente se anuncian cada uno de los cinco misterios que se contemplan ese día.
Los lunes y sábados se contemplan los misterios gozosos; los martes y viernes, los dolorosos; los jueves, los luminosos; y los miércoles y domingos, los gloriosos.
Cada misterio se compone de un Padrenuestro, diez Avemarías y un Gloria. Cuando se han rezado los cinco misterios, se rezan las letanías de la Virgen, oraciones de alabanza a nuestra Madre.
Según las tradiciones de distintos lugares, a esta estructura básica para rezar el Rosario se añaden algunas jaculatorias y oraciones que expresan la riqueza de la piedad popular.
¿Por qué se aconseja rezar el Rosario?
El Rosario de la Virgen María es una oración aconsejada por el Magisterio de la Iglesia Católica; en la sobriedad de sus elementos, tiene en sí la profundidad de todo el mensaje evangélico, del cual puede decirse que es un resumen. Además, la misma Virgen María, cuando se ha aparecido en la Tierra, ha animado a rezar esta oración. El 13 de mayo de 1917, en su primera aparición en Fátima, María dijo: “Rezad el Rosario todos los días para alcanzar la paz del mundo y el fin de la guerra” y en su última aparición en ese lugar la Madre de Dios se presentó como la “Señora del Rosario”.
Numerosos papas han atribuido gran importancia a esta oración: León XIII promulgó la encíclica Supremi Apostolatus Officio, un documento de gran entidad, la primera de sus muchas declaraciones sobre esta oración, en la que propone el Rosario como arma espiritual efectiva contra los males que afligen a la sociedad.
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